La historia de Ignacia, Adolfo y la Copa del Amor
Ignacia y Adolfo, atrapados en un torbellino de emociones y sueños compartidos, se preparaban para celebrar su unión en un futuro cercano. Sin embargo, el destino, cruel y caprichoso, tenía otros planes. Justo cuando el amor alcanzaba su cúspide, Ignacia cayó enferma. Su partida fue repentina y devastadora, especialmente en su padre, cuyo dolor lo llevó a vender el astillero.