Se cumplen 24 años de los atentados del 11 de septiembre. Dos aviones comerciales llenos de pasajeros fueron impactados contra las torres del World Trade Center en Manhattan, Nueva York. Simultáneamente otro caía sobre el pentágono y un cuarto cayó al suelo antes de llegar a su objetivo en Washington.
Estos ataques suicidas, cometidos por Al Qaeda, cristalizaron la guerra que se venía incubando desde hacía por lo menos dos décadas entre Estados Unidos y algunos países árabes. Estados Unidos declaró la guerra contra el terrorismo e invadió a Afganistán, país que protegía a Bin Laden, cabeza más visible de Al Qaeda. Los atentados se cobraron casi 3000 vidas y afectaron a muchas más a nivel mundial. El 20 de septiembre, el presidente estadounidense George W. Bush declaró la «Guerra contra el Terror» y afirmó que derrotar al terrorismo era ahora la lucha del mundo.
Estados Unidos había sufrido atentados terroristas anteriormente, pero ninguno de la misma magnitud ni trascendencia. El 11-S conmocionó al mundo y marcó la evolución de la generación venidera. El 9/11 fue un ataque directo al corazón mismo de Estados Unidos continental, un evento nunca antes experimentado de forma tan directa por los estadounidenses.
Pero también tuvo consecuencias catastróficas a largo plazo en todo el mundo. Más de 90 países perdieron ciudadanos en los ataques, incluyendo 67 personas del Reino Unido.
Los sucesos condujeron directamente a la guerra en Afganistán, a la declaración estadounidense de la Guerra contra el Terror y, posteriormente, a la invasión de Irak . Ambos países siguen sumidos en el conflicto.
Los efectos también se sintieron más cerca, pues muchos gobiernos, incluido el del Reino Unido, comenzaron a introducir nueva legislación antiterrorista para combatir la percibida amenaza del terrorismo internacional. Fue un día histórico que cambió el mundo y su legado sigue siendo complejo.
FOTOS: Agencia de noticias Reuters