El mentón es una parte de la mandíbula que se encuentra debajo de la boca y que sobresale hacia adelante en la cara. También se le llama barbilla. Existen varias razones por las que una persona quiera cambiar la forma de su mentón y así el aspecto de su cara. Entre las más comunes tenemos:
- Un mentón pequeño o retraído: Algunas personas sienten que su mentón es muy pequeño en comparación con el resto del rostro, esto puede afectar su apariencia facial general.
- Mentón prominente: Mentón demasiado prominente que deseen reducir para obtener un perfil facial más equilibrado.
- Asimetría del mentón: Causada por factores genéticos o lesiones, y puede resultar en una apariencia facial desigual que algunas personas desean corregir.
- Envejecimiento facial: Con el envejecimiento, la piel y los tejidos faciales pierden elasticidad y comienzan ceder, lo que puede hacer que el mentón parezca menos definido.
- Mentón muy largo en sentido vertical.
- Mejora de la armonía facial: Algunas personas desean mejorar la armonía general de sus rasgos faciales mediante la modificación de su mentón.
La especialidad de Cirugía Maxilofacial ofrece la posibilidad de cambiar quirúrgicamente el aspecto del mentón y es lo que se denomina: Mentoplastia o mentonoplastia.
Es importante tener en cuenta que la decisión de someterse a esta operación debe ser cuidadosamente considerada y discutida con el cirujano, ya que cualquier procedimiento quirúrgico conlleva riesgos y consideraciones importantes.
Lógicamente para que un paciente sea candidato necesita ser evaluado por un grupo de Especialistas que harán preguntas, examinarán y solicitaran un grupo de exámenes para definir que anomalia tiene el mentón para escoger la técnica quirúrgica.
El procedimiento implica hacer un abordaje intra o extraoral, es decir, una incisión que nos permita llegar al hueso de la barbilla, realizar unos cortes en la misma, quitar o añadir una porción de hueso, remodelar, centralizar y en algunos casos colocar un implante de silicona para aumenta la proyección de la barbilla. También se pueden realizar otros ajustes en la estructura ósea de la mandíbula para lograr un aspecto más equilibrado y armonioso.
La mentoplastia se realiza bajo anestesia general con el paciente internado o local y generalmente se realiza como un procedimiento ambulatorio, lo que significa que puede irse a casa el mismo día como un alta precoz. Luego de la cirugía, se prescriben antibióticos, analgésicos y una dieta líquida, suave, durante varios días para permitir la recuperación del
paciente.
El pronóstico para los pacientes que se someten a una mentoplastia es generalmente bueno, con resultados visibles inmediatamente después de la cirugía. Sin embargo, es importante seguir las instrucciones del médico y programar un seguimiento para asegurarse de que no haya complicaciones posteriores a la cirugía.
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